Edmundo Poy nos aseguró que ha sido el festival más emotivo en ocho años de sucesivas ediciones. El homenaje a Nereyda Rodríguez, es a lo que apunta el director general del Encuentro de Danza Contemporánea (EDANCO), matriz de este espectáculo anual.
El festival arrancó el pasado 18 de septiembre con la participación del Teatro Popular Danzante (dirigido por Nereyda Rodríguez hasta su muerte) y Diego Arvelo, quienes honraron a la fallecida artista de la danza. Además se proyectaron antiguas imágenes y videos de sus interpretaciones.
España
Algo más inusual fue la propuesta del colectivo español MOPA con “Espérame despierto”, pieza creada en colaboración con Juan Kruz Díaz de Garaio Esnaola.
Algo más inusual fue la propuesta del colectivo español MOPA con “Espérame despierto”, pieza creada en colaboración con Juan Kruz Díaz de Garaio Esnaola.
Los sevillanos Juan Luis Mantilla y Eloisa Cantón fueron los intérpretes de este “diálogo íntimo” que corría de lo gracioso a lo crudo, de lo sensual a lo infantil.
Una indumentaria simple, un violín y una concertina son parte de esta multipremiada producción de movimientos casi geométricos (cual una caja de Rubik) y donde el silencio era tan explícito que apenas interrumpían el sonido de los flashes y el estornudo de un espectador.
Originalmente la pieza dura más de una hora, pero tuvo que ser acortada para adaptarse al festival, esforzándose por “respetar el hilo y la narrativa” de la obra.
“Aprenderla fue sudor y sangre” expresó Mantilla. MOPA nació hace 20 años. “En danza contemporánea nos gusta mucho tirarnos por el suelo”, explicó Mantilla, en alusión al origen del nombre (equivalente a limpiar el suelo).
Ecos de Haití
Con “Te saludo Katherine” la bailarina y coreógrafa canadiense y de padres haitianos, Sara Rénelik, quiso también homenajear a otra gran artista de la danza conocida como la precursora, reina y madre de la danza negra, Katherine Dunham. Acompañada de un tambor tradicional hatiano (Mama Tambou), un piano y percusiones, Rénélik interpretó una danza de agradecimiento, angustiosa y salvaje.
Con “Te saludo Katherine” la bailarina y coreógrafa canadiense y de padres haitianos, Sara Rénelik, quiso también homenajear a otra gran artista de la danza conocida como la precursora, reina y madre de la danza negra, Katherine Dunham. Acompañada de un tambor tradicional hatiano (Mama Tambou), un piano y percusiones, Rénélik interpretó una danza de agradecimiento, angustiosa y salvaje.
La historia de esta pieza podría parecerle inverosímil, pero un 12 de octubre del 2010 Sara y su hijo se encontraban en Puerto Príncipe. Cinco minutos antes del terremoto salían a ver un homenaje a Dunham. Es por eso que también esta danza es “un reconocimiento a la resistencia y la perseverancia de luchar por la vida” que tuvieron cientos de supervivientes atrapados en los escombros.
Algo que Rénélik admira de Duhnam es que “hasta sus 96 años de edad estaba trabajando, desarrollando una escuela en Haití”.
Colombia y Martinica
Las propuestas de estos dos países son profundamente reflexivas e inspiradas en dramas sociales latentes y pasados.
Las propuestas de estos dos países son profundamente reflexivas e inspiradas en dramas sociales latentes y pasados.
La compañía Christiane Emmanuel de Martinica (nombre de la bailarina y coreógrafa autora de la pieza) presentó “Choque”, danza inspirada en un período de crisis que originó en la isla caribeña dos meses de huelga general.
A la delantera de una inmensa cortina de camisas blancas, Emmanuel corría con desesperación, dando vueltas a un inmenso cúmulo de camisas en el centro del escenario.
“La escenografía representa el mundo, la gente que estaba en la calle y yo preguntándome dando vueltas, rodando” explica Christiane.
De la pila de camisas sobre las tablas extrajo todo tipo de ropas: una alegoría referente tanto a los pobres que buscan comida y ropa de la calle, como a los ricos insaciables que siempre quieren más. Ambos motivados por el “miedo a no tener mañana”.
“En silencio” del dueto colombiano Kalus, fue interpretada por Pilar Hernández y John Fandiño. “Es una investigación sobre una problemática que ha afligido a los colombianos por más de 50 años” contó Fandiño: el conflicto armado de Colombia.
“Esperamos que termine lo más pronto posible pero mientras eso no suceda, vamos a seguir hablando de ella y visualizándolo”.
Para hacerlo se vistieron de negro y en una parte de la presentación utilizaron sus retratos enmarcados, que exhibieron al público, y al darles vuelta un espejo reflejó la luz del apuntador. Un recurso único que busca demostrar que “hoy nos toca a nosotros los colombianos pero mañana puede ser cualquiera”.
Dos continentes Europa y América
A lo largo de ocho días de danza en la Sala Máximo Avilés Blonda del Palacio de Bellas se presentaron España, Haití, Martinica, Colombia, Puerto Rico y Cánada. Hoy es el cierre del festival con Piqué Dance Studio (Cánada) y participaciones locales.
A lo largo de ocho días de danza en la Sala Máximo Avilés Blonda del Palacio de Bellas se presentaron España, Haití, Martinica, Colombia, Puerto Rico y Cánada. Hoy es el cierre del festival con Piqué Dance Studio (Cánada) y participaciones locales.
Nereyda Rodríguez una gran maestra de la danza
EXHIBICIÓN DE LOS RECUERDOS DE NEREYDA
La fundación del Teatro Popular Danzante (Funtepod) dispuso un espacio hacia el ala derecha de la Sala Máximo Avilés Blonda, para exponer diversos retratos de la bailarina y coreógrafa dominicana Neryda Rodríguez, quien dirigió la compañía de danza hasta su muerte el año pasado. Las fotografías muestran diversas etapas de su carrera artística, presentaciones y shows en los que participó. También uno de sus trajes más peculiares figuraba entre los recuerdos de esta estrella de la danza, a la vista del público.
La fundación del Teatro Popular Danzante (Funtepod) dispuso un espacio hacia el ala derecha de la Sala Máximo Avilés Blonda, para exponer diversos retratos de la bailarina y coreógrafa dominicana Neryda Rodríguez, quien dirigió la compañía de danza hasta su muerte el año pasado. Las fotografías muestran diversas etapas de su carrera artística, presentaciones y shows en los que participó. También uno de sus trajes más peculiares figuraba entre los recuerdos de esta estrella de la danza, a la vista del público.
Una de las últimas coreografías que trabajó conceptualmente, “El muerto”, fue presentada el año pasado, días después de su fallecimiento y volvió este año en el primer día del festival. “Cuando ella terminó esa pieza, cayó en coma y se presentó en EDANCO estando ella en la clínica. Esa va a ser una de las piezas más representativas de Nereyda Rodríguez y del Teatro Popular Danzante” declaró Mundo Poy, director general del Encuentro de Danza Contemporánea (EDANCO), al cual no deja de sorprenderle el vínculo entre la pieza y el fallecimiento de la bailarina.
Nereyda Rodríguez dio sus primeros pasos artísticos en la escuela de La Voz Dominicana donde recibió un certificado como bailarina profesional, en una época en la que ser de piel negra podía cerrar muchas puertas en el mundo de las artes. Perteneció al “Ballet Negro del Trópico” y se presentó en diversos escenarios locales, incursionando también en la televisión. Junto a Magalis Abreu, Jaime Lucero y Rafael Contreras inició en el 1980 el Teatro Popular Danzante, que hoy dirige su hija, Senia Rodríguez.
También se presentó en el festival una exhibición de fotografías bajo el sello de EXPO-EDANCO, en el que un jurado selecto premia la mejor fotografía realizada en las presentaciones del año anterior. También se otorga el Premio del Público. (Listín)
No hay comentarios:
Publicar un comentario