miércoles, 30 de noviembre de 2011

JENNIFER LÓPEZ Y MARC ANTHONY VENDIDOS COMO SERES SIN ESCRÚPULOS

El flaco Anthony y la coquetona Jennifer

Por Agustín de la Cruz, NY.

Desde la supuesta separación de La diva y el Flaco del Bronx, sus vidas se han convertido en un total escándalo, sin límites ni precedentes, unos alegan que se trata de un pobre montaje publicitario, otros se sienten indignados ante el mal manejo de dos de nuestros más queridos artistas.
Verdad o mentira esos escándalos están vendiendo la mala imagen de una JLO cuero, depravada y sin escrúpulos, capaz de acostarse con cualquiera para mantener vigencia en los medios o poder apagar un fuego interino que no le permite mantener una conducta de mujer digna, o simplemente una mujer sin norte a la que sin aun divorciarse ya le señalan varios amantes.
Donde está quedando la jovencita que desde el suelo logró alcanzar su estrella, la actriz, cantante y empresaria, que ha logrado realizar el sueño de tantas. Sera que la fama y la fortuna son sinónimos de descredito, corrupción y vicios. Qué papel juega su creencia religiosa en sus vida?; qué importancia tiene Dios para ellos?
Reconocemos que los tiempos cambian, pero las buenas costumbres y la educación recibida, no puede caer al vacío y menos en una mujer que comenzó a recibir formación hace 40 años,  y aunque físicamente sigue siendo hermosa, el látigo del tiempo le ha de pedir cuentas.
En mi caso como hombre, carnal, morboso y pecador, me gustaría figurar en su supuesta lista de amantes, pero como padre de dos niñas adolecentes, me preocupa el que JLo pueda servirle de mal ejemplo, porque resulta que muchos de nuestros artistas, olvidan que son el ejemplo a seguir para las nuevas generaciones, y en el caso de JLO, parece haber olvidado que es madre, y que en su momento avergonzará a sus primogénitos, siempre que no deje de hacer público esa supuesta inconformidad sexual que quieren hacer creer impera en su vida.
En el caso de Marc, entendemos que con su silencio está vendiendo la imagen de poco hombre, unos de esos que soportan todo, tan solo por la esperanza de recuperar la mujer perdida.
Cualquier otro en su lugar, defiende su papel masculino y pone pública distancia a estos escándalos, para evitar que los medios lo continúen vendiendo como un cuernudo.  (SoyLatino.net).

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